Precio: 50€-60€
Qué comimos: como entrantes hemos probado los percebes, sabrosos aunque pequeños (7,5), las almejas marinera (8), ración escasa y las cigalas (8) que nos las pusieron a la plancha (error!) y no demasiado grandes. Como platos principales probamos la lubina (7,5) y el virrey (8), mejor éste último aunque ambos de buena calidad.
Qué bebimos: pedí un Muga reserva, así complicado equivocarme.
Los postres: tarta de almendra (8,5) y tarta de queso (7).
Qué destaca: los pescados, aunque nos sorprendió gratamente las almejas.
Curiosidades: se trata de un restaurante especialista en pescados al horno y está situado enfrente de un establecimiento de venta de marisco. Nos invitan a los licores y el café está bueno. Eso sí, si no es por el camarero, nos hubiéramos comido tres cigalas más y de las grandes.......
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